24 de febrer del 2007

Missió

Al voltant de les lectures de l'Evangeli de les útlimes setmanes, en el grup hem parlat del compromís del cristià, o, millor dit, de quina missió té, cadascú en particular, com a cristià.

També he parlat molt amb la meua parella sobre este tema...

És obvi que tinc (i ella també) una inquietud per ser sol·lidari, anem a dir-ho així. Una inquietud, un esperit, unes ganes...

D'una banda, pense que la meua vida no està completa si no hi ha una quota dedicada a fer alguna cosa pels demés, de manera desinteresada, gratuïta, etc. Però això sols no és suficient: u corre el risc de fer coses pels demés amb l'única finalitat de sentir-se millor amb si mateix.

Pense que cal completar eixe sentiment amb un altre: la certesa que estem obligats a donar-nos als altres. Que no podem viure esta vida si no és donant-nos als altres. Que ser sol·lidari és, més que una opció, una obligació (només faig que repetir i refermar-me en coses que ja he escrit ací). És la conseqüència lògica d'estimar este món i la gent que l'habita. És la conseqüència lògica de voler ser feliç, no tot sol, sinó acompanyat de tot el món en eixa busca de la felicitat.

Si estic dient que, per a mi, la busca d'una missió equival a concretar ser sol·lidari en accions...

Si estic dient això, torne a la conclusió de sempre: fins que no aprenga a organitzar-me el temps, no puc pretendre donar part del meu temps a cap causa sol·lidària (ni a cap projecte nou), perquè només provocaria més caos en la meua vida.

Potser sóc un poc radical, en la manera d'escriure-ho. Puc fer coses, clar. Sobretot, no dec ni puc deixar de buscar, d'estar atent, d'estar disponible...

Hui he estat comprant en una tenda de comerç just, i he descobert, a més dels regals més típics i freqüents, una muntonada de llibres interessants.

Últimament, m'adonaba que passava ràpidament les pàgines dels periòdics relatius a les guerres o les desgràcies al Tercer Món, etc. També, canviava de cadena quan en la televisió es parlaven d'estos temes... Potser no puc evitar-ho; i hi ha moments en què necessites evadir-te i pensar en altres coses...

El fet és que, de tota manera, entrar de nou en este establiment de comerç sol·lidari i, sobretot, llegir un poc d'estos llibres, m'ha fet reaccionar, m'ha fet obrir un poc els ulls de nou...

Una cosa que sí que puc fer és estar més informat, estar més al dia, i, en la mesura de les meues possibilitats (a través d'este blog, a través del meu treball com a docent...) donar a conéixer realitats que, en la cultura del benestar en què ens trobem, de vegades no interessa escoltar...

Bé, no sé... Només volia compartir amb vosaltres com em trobe, dins d'eixa busca de la missió com a cristià, dins d'eixa cerca per ser més sol·lidari.

4 comentaris:

Anònim ha dit...

Hola...
Hacía tiempo que no te leía y hoy tenía un ratito para perderme en el mundo de los blogs y he pensado... voy a visitar a kaminant.
Se lo que dices cuando hablas de buscar cual es tu misión en esta vida, como cristiano, como persona que busca un mundo más hermano y más humano...
sólo que encuentro un problema...
uno nunca termina de tener cosas que hacer, cosas pendientes, conversaciones, viajes, amigos, familia...
¿qué hacer entonces?
¿cómo decidir cuando es el momento de decirse a uno mismo: esto mio termina aquí?
¿no es necesario "sacrificar" lo propio en algún momento?
Las personas verdaderamente solidarias... ¿es que no tienen algo propio que hacer, que organizar?
¿cómo intercalar?
¿Cómo entregarse sin perderse?
¿es posible?
¿cómo darse sin desaparecer (aunque sea un poco)?
Creo que estas son preguntas espinosas en torno al compromiso, a la entrega, a la busqueda de la misión personal...
A mi siempre me acompañan estas preguntas, que no dejan de intranquilizarme, además creo que estos planteamientos siempre nos inquietan cunado nos los hacemos...
En fin ánimo en la búsqueda...
Tenemos un plazo ¿recuerdas?
yo también estoy en ello...
besitos

Carmen Bellver ha dit...

Estimado kaminant, llevo muchos años deseando colaborar en proyectos solidarios. Lo único que he consiguido es hacer aportaciones económicas. Mi tiempo, siempre está ocupado. También he creado un blog y me cuestiono si no debería dejarlo y consumir más horas en otros proyectos mas humanos.
Es decir que dudas,tenemos todos.
Así que ánimo, cualquier día encuentras tu lugar.

Kaminant ha dit...

Hola, Amparo...

Me da serenidad pensar en ti, porque mi experiencia en el último año, sobre todo, es de estar muy a gusto en el grupo, y de sentirme bastante en sintonía con todos vosotros.

[Sé que cada uno de nosotros lleva su ritmo y vive su fe como buenamente entiende, pero me siento muy unido a vosotros, por nuestra historia juntos, por la confianza, por esa complicidad que últimamente tanto te gusta destacar, por el estilo en el decir y el hacer las cosas..., porque os quiero; y me siento correspondido.]

Realmente, después de tantas semanas pensando y dándole vueltas a este tema de la misión, del proyecto de vida... sigo pensando un poco lo mismo que cuando escribí este post. Mi vida es un poco caótica, y no sé cómo organizarla para meter otras cosas.

Pero sí me he dado cuenta de que, para que quepan otras cosas, antes tendré que quitar algunas. Es decir, como tú dices, quizás hay que sacrificar algo de lo propio... Por cierto, ¡gracias por compartir todo esto conmigo!

Sé, también, que tanto pensar no me conduce a nada, y que, lo que debo hacer, es actuar. Este blog, en el fondo, es como un diario de mis pensamientos, una proyección de las muchas vueltas que doy a los temas, y, también, una manera de macerarlos y desbrozarlos.

En la Cuaresma avancé poco en mi propósito de entender qué quiere Dios de mí, o cuál es mi proyecto de vida...

En todo caso, sí que sé que, sea cual sea el objetivo, hay acciones concretas que puedo y debo poner en práctica: un espacio para la oración, y un espacio para la formación. Y, en general, reorganizar mi tiempo, y dar más lugar para otras cosas además de mi trabajo. Sacrificando un poco éste, o bien intentado organizarme mejor.

Este fue mi conclusión en Semana Santa. Los primeros días de Pascua me han servido para descansar y cargar pilas, coger carrerilla, coger fuerza...

Quiero ser más concreto, quiero ser más directo. Deseo ver más claro que puedo ayudar a hacer de este mundo un lugar más humano...

Quiero ser más coherente, cada día...

Un abrazo. Nos vemos pronto. :-)

Jobove - Reus ha dit...

em visitat el teu blog, si tens temps visita el nostre, gràcies